Descripción
La pintura St Francis of Paola de Jusepe De Ribera es una obra maestra del Barroco español que destaca por su composición dramática y su técnica magistral. En ella, el artista representa al santo fundador de la orden de los Minimos, una figura religiosa muy venerada en la época, en un momento de éxtasis místico.
La figura de San Francisco de Paula se encuentra en el centro de la composición, arrodillado en una roca y con los brazos extendidos hacia el cielo. Detrás de él, se aprecia un paisaje rocoso y agreste, con un mar embravecido en el horizonte. La luz, que proviene de la derecha, ilumina el rostro del santo y crea un efecto de claroscuro que realza su figura.
El estilo artístico de Ribera se caracteriza por su realismo y su intensidad emocional. En esta obra, el artista utiliza una técnica de pincelada suelta y gestual, que le permite crear una sensación de movimiento y dinamismo en la figura del santo. Además, el uso de colores oscuros y terrosos contribuye a crear un ambiente de sobriedad y espiritualidad.
La historia de la pintura es interesante, ya que se sabe que fue encargada por el duque de Medina de las Torres en 1645 para su capilla privada en Sevilla. Posteriormente, la obra pasó a formar parte de la colección del Museo del Prado, donde se encuentra actualmente.
Uno de los aspectos menos conocidos de esta pintura es que Ribera utilizó su propia imagen como modelo para representar al santo. Se cree que el artista se identificaba con la figura de San Francisco de Paula, ya que ambos eran de origen italiano y habían emigrado a España en busca de mejores oportunidades.
En definitiva, la pintura St Francis of Paola de Jusepe De Ribera es una obra de gran valor artístico e histórico, que destaca por su técnica magistral y su intensidad emocional. Su composición dramática y su uso del claroscuro la convierten en una de las obras más emblemáticas del Barroco español.