Descripción
¿Le sorprendería descubrir que el título por el que se conoce la pintura más famosa de Rembrandt es realmente falso? La Ronda de Noche no es una escena nocturna en absoluto; en realidad tiene lugar durante el día. Este título, que no fue otorgado por el artista, se aplicó por primera vez a fines del siglo XVIII.
Para ese entonces la pintura se había oscurecido considerablemente por la acumulación de muchas capas de suciedad y barniz, dando la apariencia de que el evento ocurre de noche.
¿Llevó La Ronda de Noche a la caída de Rembrandt?
Ha crecido un mito en torno a la aparente caída en desgracia de Rembrandt relacionado a esta magistral obra de arte.
¿Realmente condujo La ronda de Noche a la caída de Rembrandt como algunos han manifestado?
Quizás podemos examinar la pintura, no en busca de pistas sobre una conspiración para asesinar, sino para ver cómo Rembrandt se desvió de las normas de un subgénero que fue muy popular en la nueva República holandesa: el retrato de la milicia cívica, o La Escena de la Sala de Guardia.
Hablemos primero de su tamaño descomunal. Las dimensiones originales de la pintura fueron reducidas en un corte. Aún con el corte, ésta es la composición más magistral de Rembrandt hasta la fecha, midiendo un descomunal 365 x 426 cm.
En esta obra maestra de ricos matices y tenebrosos, en el que la luz se utiliza para dar a la escena una cualidad etérea en medio del habitual bullicio de movimiento y acción, detectamos cierta extrañeza, cierta irrealidad en la escena, aunque sea una pintura llena de ruido.
La ronda de noche de Rembrandt es un ejemplo de un tipo de pintura muy específico que era exclusivo del norte de los Países Bajos, siendo la mayoría encargada en la ciudad de Ámsterdam. Es un retrato de grupo de una compañía de guardias cívicos. El propósito principal de estos guardias era servir como defensores de sus ciudades. Como tal, tenían la tarea de vigilar las puertas, vigilar las calles, apagar incendios y, en general, mantener el orden en toda la ciudad. Además, fueron una presencia importante en los desfiles realizados para la realeza visitante y en otras ocasiones festivas.
Cada compañía tenía su propia sala de gremio, así como un campo de tiro donde podían practicar con el arma específica asociada con su grupo, ya sea un arco largo, una ballesta o un arma de fuego. Según la tradición, estos salones de actos fueron decorados con retratos grupales de sus miembros más distinguidos, lo que sirvió no solo para registrar el parecido de estos ciudadanos, sino más importante para afirmar el poder y la individualidad de la ciudad que defendían. En resumen, estas imágenes ayudaron a promover un sentido de orgullo y deber cívico.
El nombre de la pintura, La Ronda de Noche, llegó en la década de 1790, cuando el barniz de la pintura se había oscurecido y estaba lo suficientemente sucio como para aparentar una escena nocturna crepuscular y misteriosa.
Rembrandt y La Ronda de Noche - del ocaso a la gloria
Dos factores contribuyeron en gran medida a los problemas de Rembrandt en la segunda mitad del siglo. El artista se tornó cada vez más extravagante: la gran casa en la que habitaba, las curiosidades y antigüedades que lo rodeaban, la adquisición de bellas artes. El otro aspecto tenía que ver con su manejo suelto y libre de la pintura.
Su estilo estaba comenzando a pasar de moda. Lo que estaba llegando era el tipo de "pintura fina" muy pulida que practicaban personas como el ex alumno de Rembrandt, Gerrit Dou, quien pronto eclipsó a su antiguo maestro en términos de fama y éxito. Rembrandt tuvo que esperar hasta el surgimiento de los impresionistas antes de ser, en cierto sentido "re-descubierto" y puesto en el lugar correcto en la historia del arte.
Aún incluso después de esta obra maestra haber sido limpiada de ese barniz mugriento en 1946, la pintura ha logrado aferrarse al misterio sensacional que la rodea.
La Ronda de Noche ocupa el puesto no. 4 en la lista de pinturas famosas