Descripción
La pintura "San Bernardino" de El Greco es una obra maestra del siglo XVI que destaca por su estilo artístico único y su composición impresionante. El cuadro, que mide 269 x 144 cm, muestra al santo Bernardino de Siena en una pose majestuosa y elegante, con una expresión serena y piadosa en su rostro.
El estilo artístico de El Greco es muy evidente en esta obra, con su uso de formas alargadas y estilizadas y sus colores brillantes y vibrantes. El artista logra crear una sensación de profundidad y movimiento en la pintura, con el santo en el centro de la imagen y los personajes circundantes en poses dinámicas y expresivas.
El colorido de la pintura es impresionante, con tonos intensos de rojo, azul, verde y amarillo que se combinan de manera armoniosa y equilibrada. El Greco también utiliza la luz y la sombra de manera magistral, creando un efecto dramático que resalta la figura del santo y los detalles de su vestimenta y accesorios.
La historia de la pintura es interesante, ya que fue encargada por la Orden de los Franciscanos Descalzos de Toledo en 1599. El cuadro se colocó originalmente en el altar mayor de la iglesia de San Juan de los Reyes en Toledo, donde permaneció hasta que fue trasladado al Museo del Prado en Madrid en el siglo XIX.
Además, un aspecto poco conocido de la pintura es que El Greco incluyó una imagen de sí mismo en la obra, en la figura del hombre con sombrero que se encuentra en el fondo de la imagen. Esta es una muestra más del ingenio y la creatividad del artista, que logró crear una obra de arte que sigue siendo admirada y estudiada hasta el día de hoy.