Descripción
Retrato de Paciencia Escalier es una obra del famoso pintor postimpresionista Vincent van Gogh, creada en 1888. Este retrato es especialmente interesante porque Van Gogh lo pintó durante su estancia en Arlés, en el sur de Francia, un período que se considera uno de los más productivos e importantes de su carrera.
Paciencia Escalier era un pastor y antiguo agricultor que se convirtió en modelo para Van Gogh durante su tiempo en Arlés. La elección de Escalier como sujeto del retrato refleja el interés del artista en representar a las personas comunes y trabajadoras de la época. Van Gogh consideraba que los campesinos y obreros, como Escalier, encarnaban la nobleza y la dignidad del trabajo duro, y deseaba capturar esa esencia en sus pinturas.
En "Retrato de Paciencia Escalier", Van Gogh utiliza pinceladas audaces y expresivas, así como una paleta de colores vibrantes, característicos de su estilo postimpresionista. El fondo amarillo brillante contrasta con el rostro y las manos curtidas de Escalier, lo que destaca su experiencia y vida como trabajador manual.
Además, la chaqueta azul que lleva Escalier en el retrato fue un elemento intencionado de Van Gogh para establecer un contraste con el cuadro "Retrato de un campesino" de Jean-François Millet, uno de los artistas a los que más admiraba. Esta decisión muestra la influencia que Millet tuvo en la obra de Van Gogh y su interés en conectar su arte con la tradición pictórica francesa.
Durante su estancia en Arlés, Vincent van Gogh se inspiró profundamente en la naturaleza y los paisajes rurales que lo rodeaban. Este entorno le proporcionó una gran cantidad de material para sus pinturas, como las representaciones de campesinos, como Paciencia Escalier, y escenas de la vida cotidiana en el campo. En este período, Van Gogh también experimentó con la luz y el color, y su paleta se volvió más brillante y luminosa.
En cuanto a la técnica utilizada en "Retrato de Paciencia Escalier", Van Gogh aplicó la pintura de manera espesa y enérgica, lo que se conoce como "impasto". Esta técnica crea una textura notable en la superficie de la pintura, lo que añade un sentido de profundidad y tridimensionalidad al retrato. Las pinceladas cortas y rápidas, junto con la textura de impasto, hacen que el retrato parezca muy vivo y dinámico, y permiten al espectador apreciar el esfuerzo y la emoción que Van Gogh puso en su trabajo.
Es interesante mencionar que Van Gogh creó dos versiones del retrato de Paciencia Escalier. Ambas versiones son bastante similares en cuanto a composición y paleta de colores, pero difieren en algunos detalles y en la aplicación de la pintura. La primera versión, realizada en agosto de 1888, se encuentra actualmente en el Norton Simon Museum en Pasadena, California, mientras que la segunda versión, realizada un mes después, está en la colección privada de la familia Niarchos.
Estas dos versiones ilustran la importancia que Van Gogh otorgaba a la experimentación y la evolución en su obra, siempre buscando mejorar y perfeccionar su técnica y su representación de los sujetos que elegía.