Descripción
La Adoración de los Magos es considerada la obra maestra de Gentile da Fabriano. La pintura muestra el viaje de los magos a Belén contado en el Evangelio de Mateo. La pintura utiliza una narrativa continua para mostrarnos el momento en que los magos ven por primera vez la estrella que anuncia el nacimiento de Jesús, seguido de su viaje a Jerusalén y luego su llegada a Belén, donde se encuentran con el niño Jesús.
Tres arcos dorados (que forman parte del elaborado marco) diferencian los tres momentos narrativos de la obra, aunque el momento final, cuando los magos llegan a la cueva de Belén donde descansan María, José y Jesús, se apodera del primer plano.
Aquí los magos se turnan para arrodillarse ante Jesús y presentarle regalos (de oro, incienso y mirra). En la pintura de Gentile, el mago más antiguo (conocido finalmente como Melchor) está besando el pie de Jesús, mientras el mesías cristiano (Jesús) le toca la cabeza. Los otros dos magos (Gaspar, de mediana edad; y Balthazar, joven) se preparan para hacer lo mismo, sosteniendo sus regalos en alto. Los tres magos están vestidos elaboradamente y cada uno tiene una corona dorada.
El retablo La Adoración de los Magos representa varias historias del evangelio que rodean el nacimiento de Cristo tal como fueron contadas en la Edad Media y el Renacimiento. Por ejemplo, en el panel principal, tres magos (sabios y reyes que se cree provienen de tierras orientales desconocidas) ofrecen regalos al niño Jesús recién nacido. Su aventura comienza en el fondo: escenas más pequeñas de los Magos llenan un paisaje extraordinario en los tres arcos de arriba, lo que nos permite seguir su viaje en una narración continua como una caricatura.
En el extremo izquierdo, escalan una montaña en busca de la estrella que creían que cumpliría una antigua profecía que habla de un gran rey. Siguiendo esta estrella, los magos conducen su impresionante séquito a Jerusalén, que se muestra en el centro superior de la pintura (ver imagen de arriba), y luego a la ciudad más pequeña de Belén en la esquina superior derecha.
La acción principal del panel se desarrolla luego en primer plano, donde los Magos finalmente llegan a la pequeña cueva donde José y María se han visto obligados a refugiarse con su hijo recién nacido. Halo y resplandeciente, cada rey se turnó para ofrecer un regalo de oro, incienso o mirra, quitarse la corona y besar el pie del pequeño bebé.
Como en las imágenes anteriores, éstos van acompañados de un gran número de cortesanos y asistentes a caballo como si fueran emisarios de un país extranjero. Más que artistas anteriores, Gentile da Fabriano utilizó el viaje de los magos como una oportunidad para mostrar su imaginación visual y habilidad técnica. Los "reyes" no visten ropa antigua, como cabría esperar de una historia bíblica, sino trajes imaginativos diseñados para parecer lujosos y vagamente exóticos.
El séquito real está repleto de variados tipos de figuras, brocados de intrincados dibujos y animales raros. Las figuras en primer plano están casi apiladas unas sobre otras, como si el suelo estuviera inclinado hacia adelante para llenar un espacio limitado con un número máximo de figuras. Esta opulencia decorativa continúa en el marco ornamentado de tres arcos.
La pintura se encuentra en la Galería Uffizi desde 1919 y fue restaurada en 2004.
Esta obra de arte por la cantidad de detalles es una pintura muy difícil de elaborar, por lo que el costo de una réplica de Kuadros está sujeto a la disponibilidad, y tiempo de selectos artistas.
Kuadros, una pintura famosa en su pared.