Retrato De K. Perefer - 1906


Tamaño (cm): 60x75
Precio:
Precio de venta$381.00 CAD

Descripción

En 1906, Mykola Pymonenko, reconocido pintor ucraniano, completó el "Retrato de K. Perefer", una obra que encapsula la esencia del retrato a través de un enfoque que mezcla la intimidad de la representación personal con el estilo característico de la pintura de la época. La obra destaca por su naturalismo, donde la captación del carácter del retratado se convierte en el centro de atención, invitando al espectador a reflexionar sobre la vida y la personalidad de K. Perefer.

La composición del retrato es notable por su clara disposición y el uso del espacio. La figura de K. Perefer ocupa la mayor parte del lienzo, lo que otorga al espectador la oportunidad de analizar cada detalle del rostro y la vestimenta. Pymonenko emplea un fondo neutro que, lejos de distraer, realza la figura central, permitiendo que los matices de la piel y la complejidad del vestido se destaquen en todo su esplendor. La elección de un fondo poco ornamentado es intencionada, ya que pone de manifiesto la familiaridad tanto del artista con su sujeto como la intención de captar su esencia.

Los colores utilizados en la obra son ricos y profundos, una característica distintiva del trabajo de Pymonenko. Se observa una paleta que combina tonos tierra con sujetos más vibrantes, desdibujando los límites entre la realidad y la idealización, una dualidad que es común en el arte del siglo XIX y principios del XX. La técnica de pincelada suelta y audaz que emplea aporta un sentido de dinamismo a la imagen, dando vida a la figura y aportando una calidez que parece emanar del propio retratado. Este enfoque permitirá que las emociones del sujeto se sientan casi palpables, un aspecto intrínseco en la obra de Pymonenko.

El rostro de K. Perefer es el protagonista silencioso de la obra, imbuido de una mirada pensativa que sugiere profundidad, historia y un mundo interior rico. Esta es una de las características más admiradas del retratismo, donde la mirada se convierte en un vehículo de conexión entre el espectador y el retratado. A través de esta expresión, Pymonenko logra que el espectador no solo vea, sino que sienta la presencia del individuo, evocando un diálogo silencioso pero intenso entre ambos.

Pymonenko, influenciado por el realismo y el impresionismo, invoca en sus retratos un sentido de conexión emocional que va más allá de la simple representación visual. Su habilidad para capturar la esencia de su sujeto con un toque de modernidad en la técnica le ha asegurado un lugar importante en la historia del arte ucraniano. "Retrato de K. Perefer" no es solo una representación de un individuo; es una reflexión sobre la identidad y el tiempo, encapsulando una atmósfera que trasciende la mera imagen física.

En conclusión, esta obra de Pymonenko destaca no solo por su deseo de capturar al hombre en su forma más pura, sino también por su capacidad de conectar el arte con emociones profundas y universales. "Retrato de K. Perefer" es, sin duda, una pieza que resuena con la historia de su tiempo y al mismo tiempo espera ser redescubierta por las futuras generaciones de amantes del arte que buscan comprender mejor el alma detrás de la imagen. La pintura no solo es un testimonio de habilidades técnicas excepcionales, sino también de una profunda comprensión de la humanidad que sigue siendo relevante en el contexto contemporáneo.

KUADROS ©, una pintura famosa en tu pared.

Reproducciones de pinturas al óleo hechas a mano, con la calidad de artistas profesionales y el sello distintivo de KUADROS ©.

Servicio de reproducción de arte con garantía de satisfacción. Si no queda completamente satisfecho con la réplica de su pintura, le reembolsamos 100% su dinero.

Recently viewed